Con la rápida evolución de la tecnología en el sector turístico, los hoteles y alojamientos necesitan contar con la última tecnología para poder gestionar los clientes, fidelizarlos para que vuelvan, enviarles ofertas, etc. Es por ello que contar con un CRM para tu hotel es indispensable para poder trabajar al cliente una vez realiza la reserva, para personalizar su experiencia en el hotel para que esta sea positiva y quiera repetir.
Ventajas de tener un CRM en tu hotel
Conocer al cliente
Un CRM para hoteles permite gestionar, almacenar y analizar aquellos datos que nos proporcionan los huéspedes, como su preferencia de habitación, el tipo de pensión, en qué fechas reserva, es decir, los comportamientos de reserva. Toda esta información es crucial para poder personalizar la experiencia del huésped cuando vuelva a reservar. Con estos datos, se pueden crear campañas personalizadas para el cliente, consiguiendo una alta probabilidad de interacción, respuesta o reserva.
Centralizar la información
El CRM para hoteles centraliza toda la información sobre los huéspedes en una única plataforma, pudiendo analizar y extraer conclusiones sobre su comportamiento a la hora de reservar. También se puede filtrar por edad, ubicación, parejas, familias, habitaciones a la hora de crear campañas para un segmento concreto. Además, con la integración con otros sistemas como los motores de reservas o el PMS, se puede explotar mucho más la personalización de la experiencia del cliente.
Automatización de notificaciones
Con un CRM hotelero podrás automatizar notificaciones como por ejemplo que se le envíe un correo a un cliente el día de su cumpleaños con un descuento adicional. También podrás automatizar recordatorios para contactar con los huéspedes antes, durante y después de su estancia para que sienta que es especial y que el hotel escucha todas sus peticiones.
Fidelización del cliente
El CRM para hoteles fideliza tus clientes mediante recompensas a aquellos huéspedes que son recurrentes. Podrás ofrecerles descuentos, beneficios, upgrades de habitación, servicios personalizados, entre otros. Estas estrategias fomentan la lealtad del cliente, aumentando su satisfacción y la probabilidad de que vuelva a reservar en un futuro. Además, se puede evaluar la satisfacción del cliente enviándole encuestas para conocer su experiencia en el hotel y posibles mejoras.